El próximo 23 de julio los españoles están llamados nuevamente a celebrar la fiesta de la democracia, solamente dos meses después de las elecciones municipales y autonómicas.
La convocatoria nuevamente de elecciones, esta vez para unas generales, ha causado cierto revuelto. Y no por el hecho de las elecciones en sí, sino por la fecha elegida. Pero en este caso, son pocos los precedentes en la historia de la democracia actual: serán las terceras elecciones que se celebren en verano, y las primeras en el mes de julio, dónde muchos votantes estarán ausentes de sus lugares de residencia para disfrutar de sus vacaciones.
No es común que en España se celebren elecciones en pleno verano. Es más, en comunidades como Andalucía, la Ley electoral de la comunidad prohíbe convocar elecciones en los meses de julio y agosto para el Parlamento regional.
El “problema popular” con estas elecciones viene causado por las “loterías” de la mesa electoral. Es pequeño el porcentaje de probabilidad para que a una persona le toque acudir a la mesa electoral como Presidente, Vocal o Suplente, pero nunca imposible.
Mesa Electoral
La mesa electoral está formada siempre por un Presidente y dos Vocales elegidos por sorteo público. Además, se nombran también dos suplentes por cada uno de estos miembros de la mesa, que deberán acudir a primera hora por si hiciera falta su servicio.
Muchos dicen que el sistema de convocatoria para la mesa electoral debería ser igual al de otros países donde se presentan de manera voluntaria, pero los expertos reconocen que podría provocar una serie de problemas para nuestra “fiesta de la democracia”.
¿Y si pido el voto por correo? Mucha gente cree que pidiendo el voto por correo no te pueden convocar, pero esto no es así. Habrá que acudir igualmente. Lo único que no podrás votar presencialmente ese día, sino que ya lo tendrías que haber hecho por correo. Sabremos si nos toca parte de la Mesa entre el 24 de junio y el 1 de julio.
¿Qué pasa si tengo reconocida una discapacidad o una incapacidad?
Existe una serie de situaciones que permiten librarse de acudir a una Mesa Electoral. Una situación de discapacidad e incapacidad es una de ellas. Sea cual sea el grado de discapacidad, con un informe que lo declare podrá evitar acudir a la mesa electoral. De igual modo ocurre cuando una persona se está beneficiando de cualquier pensión por incapacidad.
Cabe destacar, que, si una persona quiere acudir a la Mesa Electoral, se encuentra en todo su derecho de hacerlo, y en caso de necesitarlo, se tendrán que adaptar las condiciones para facilitar su acceso. Ya conocimos en las elecciones del 28M el caso de Raquel Estúñiga, que quiso visibilizar que las personas con discapacidad están plenamente capacitadas para realizar estas tareas.
Siempre, en caso de no querer/poder acudir a una Mesa Electoral padeciendo alguna discapacidad o incapacidad, habrá que presentar las alegaciones pertinentes ante la Junta Electoral de Zona en un plazo máximo de 7 días.
Otros casos que eximen de ser llamado a una Mesa Electora (presentando las alegaciones correspondientes) son:
- Personas mayores de 65 años
- Embarazada de más de 6 meses
- Estar de baja por maternidad con hijo en periodo de lactancia
- Cuando te ha tocado tres veces en los últimos 10 años
- Post operatorios que impidan acudir al colegio electoral
¿Qué pasa si no me presento a una mesa electoral?
El Artículo 143 de la Ley Electoral recoge que el Presidente y los Vocales, así como sus respectivos suplentes que no se presenten o abandonen sin causa legítima la mesa electoral “incurrirán en la pena de prisión de tres meses a un año o a una multa de 6 a 24 meses”.
Esto no significa que vaya a ir la policía a buscarte, es más, sin antecedentes penales es casi imposible ingresar en prisión por esto, pero la sanción económica suele oscilar entre 2.600 y 7.200 euros y te dejaría antecedentes penales.